Labios agrietados:
Cómo recuperar pronto la sonrisa

Tener los labios agrietados es algo bastante común. Pero se traduce en incomodidad para quien lo padece a diario. Hablar y hasta comer llegan de repente a ser más complicado. ¿A qué se deben las grietas en los labios? ¿Cuál es el remedio? Te lo contamos todo.

Labios secos, agrietados, resquebrajados: causas y consecuencias

Labios agrietados: ¿Por qué se parten los labios?

La piel comprende varias capas: la hipodermis, más profunda, luego la dermis y la epidermis. Esta última capa superficial es la parte aparente de la piel. Contiene una película hidrolipídica, producida en parte por las glándulas sebáceas, para protegerse de las agresiones externas. Para prevenirse del sol, la piel produce también la melanina, gracias a los melanocitos: es un pigmento que le da a la piel su tono bronceado en verano y forma una barrera protectora contra las quemaduras.

No se encuentran ni glándulas sebáceas, ni melanocitos en los labios, resultan entonces más frágiles. Por otra parte, cabe señalar que la piel de los labios es muy fina y muy permeable. Por su relieve, la boca, al igual que la nariz, es una de las primeras partes del rostro expuesta a las agresiones exteriores (Lluvia, viento, frío...).

De un labio seco hasta agrietado: los síntomas

La magnitud del daño depende del grado de desecación de los labios. Un labio un poco deshidratado tendrá un aspecto ligeramente seco. Puede aparecer entonces una leve descamación. Si se prolonga la deshidratación, la descamación se hace más intensa, dándole al labio un aspecto blanquecino que se desgarra. Por último, cuando las fisuras se vuelven más pronunciadas, los labios pueden presentar algunas resquebrajaduras y hasta grietas que sangran. Llegado ese punto, el menor movimiento de la boca provoca dolor.

Factores que favorecen los labios agrietados

El principal factor de grieta en los labios es climático. Dos casos favorecen de hecho la aparición de las resquebrajaduras:

• Una temperatura externa muy baja. El viento fuerte y helado intensifica el fenómeno.
• Una exposición prolongada al sol, responsable de la quemazón de los labios.

Otras causas pueden aumentar los riesgos de grietas en los labios:

• Una exposición regular al cloro (en piscina).
• El uso frecuente de lápiz labial.
• La toma de cierta medicación que provoca la desecación cutánea como efecto secundario.
• El envejecimiento, que vuelve la piel menos elástica y reduce la producción de colágeno.
• Alimentos muy ácidos como el limón o el tomate.
• Una carencia en vitamina B.
• Una alergia.

Labios agrietados y herpes labial: ¿Alguna relación?
No directamente. Los labios fisurados pueden, sin embargo, favorecer la aparición del herpes labial. Cuando se curan bien las grietas, suelen sanar rápidamente. Ahora bien, si no se les proporciona el cuidado adecuado, se multiplica el riesgo de complicación por las pequeñas grietas que acompañan generalmente los labios resquebrajados. Se abre entonces la puerta a las infecciones y virus como el herpes labial.

¿Cómo curar los labios maltratados?

Cuidados adaptados de acuerdo al grado de desecación

Se debe adaptar el tratamiento en función al nivel de desecación de los labios:

• Labios ligeramente secos: un simple stick a base de manteca de karité o cera de abeja puede bastar para rehidratar los labios en forma correcta y protegerlos contra las agresiones externas.
• Labios muy secos: un bálsamo brindará una textura más rica y más adaptada a los labios que ya sufren algún daño.
• Los labios resquebrajados o agrietados: para calmar los labios agrietados y favorecer la cicatrización de las llagas producidas, existen bálsamos y sticks reparadores que ayudan a reparar la barrera cutánea.

En Cocooncenter, encontrarás una amplia selección de sticks y bálsamos protectores así como una gama especialmente dedicada a los cuidados cicatrizantes y reparadores para los labios agrietados.

Evitar los labios agrietados: trucos y consejos

A continuación, buenos hábitos que te ayudarán a prevenir la desecación cutánea de los labios:

• Beber suficiente. En efecto, la deshidratación también puede venir desde el interior por un deficiente consumo de agua.
• Privilegiar los alimentos que contienen vitamina B.
• Evitar la aplicación diaria de lápiz labial, sobre todo si tiene una textura mate que favorece por lo general la sequedad.
• Exfoliar los labios al igual que el rostro. Conviene sin embargo emplear un grano fino para preservar la fragilidad de la piel de la boca.
• Desmaquillar sistemáticamente los labios en caso de uso de lápiz labial.
• Acostúmbrate a proteger tus labios con un stick hidratante, en invierno y en verano, sin esperar la tirantez, reveladora de sequedad.
• En caso de exposición al sol o durante un viaje de esquí, protege sistemáticamente tus labios con un stick solar adecuado.
• Evita mojarte los labios en cuanto los sientas secos. Ese reflejo equivocado no hará más que agudizar la deshidratación.

Labios agrietados: remedios caseros

Algunos remedios naturales son reconocidos por su capacidad en devolver a los labios su belleza. He aquí unos ejemplos:

El pepino

Sus propiedades hidratantes y cicatrizantes son sorprendentes. Para aprovecharlas, basta con exprimir un pepino y aplicar delicadamente el jugo con un algodón en los labios. Para aumentar su eficacia, se le puede mezclar con aceite de ricino.

La miel

Extraordinario nutriente, la miel posee además virtudes calmantes y cicatrizantes. Para curar los labios muy agrietados, la miel se puede aplicar en forma de mascarilla en capa gruesa. Para optimizar su eficacia, conviene mantener este cuidado toda la noche.

La vaselina

Poderoso lubricante, la vaselina es ideal para aliviar los labios muy dañados. Como en el caso de la miel, no hay nada como aplicar la vaselina en capa gruesa y dejar reposar el cuidado toda la noche.

Los labios agrietados son una molestia tanto estética como física. Gracias a cuidados adaptados y una prevención diaria, mantener labios bellos y sanos es pan comido.

Labios agrietados, tres puntos claves para recordar

• Los labios agrietados se deben principalmente a una exposición al frío o por el contrario, al calor. Por lo cual, invierno y verano son las dos temporadas en que proteger los labios es una prioridad.
• Además del frío y del calor, existen muchos factores que pueden agrietar los labios. Nadie está libre de padecer ese fenómeno.
• Los labios resecos son una señal de alarma que no se debe descuidar. Aportar una hidratación adecuada permite evitar la aparición de grietas.